Factores para el éxito de la fertilización asistida

El éxito del tratamiento de fertilización asistida depende básicamente de tres elementos: la calidad de los óvulos, la capacidad del útero y la calidad técnica del procedimiento.

Factores para el éxito de la fertilización asistida

¿Qué factores influyen en el éxito de la fertilización asistida?

El éxito de la fertilización asistida consiste en indagar los resortes ocultos de la naturaleza. Intentar entender el fenómeno de la implantación del embrión es como contemplar un iceberg, frente a nuestra mirada está presente sólo una pequeña parte, siendo en realidad mucho más complejo y extenso. Hace al misterio y al enigma de la vida misma y es, desde el punto de vista de su estudio, de difícil acceso. Sin embargo en los últimos veinte años se ha avanzado más que en todos los siglos precedentes y estas son algunas de las situaciones que hoy conocemos.
El primer concepto que se debe entender es que el éxito de un procedimiento de fertilización asistida, que puede ser realizado mediante fertilización in vitro (FIV) convencional, GIFTICSI, donación de ovocitos u otros, más allá de la técnica depende de una suma de factores. El éxito depende básicamente de tres elementos:

  • La calidad de los óvulos y espermatozoides
  • La capacidad del útero y endometrio desarrollado durante el ciclo de tratamiento
  • La calidad técnica del procedimiento denominado transferencia (el modo mediante el cual los embriones llegan al sitio de implantación, o sea el útero materno).

La calidad de los óvulos

Los óvulos que cada mujer ovula, existen en su ovario desde el momento que ella estaba en el útero materno. Esta es la causa por la cual, estos ovocitos van envejeciendo a medida que transcurre el tiempo. A mayor edad, existe una mayor probabilidad de envejecimiento de nuestros propios óvulos que responden y acompañan al envejecimiento de los mecanismos en los que participan los genes. Esto explica la mayor falla de implantación o abortos a medida que avanza la edad materna. Asimismo el tipo de drogas o fármacos administrados para estimular el crecimiento de los folículos y ovocitos en el ovario, también pueden influir sobre la calidad de estas células.

La ovodonación

Los problemas relacionados con la edad materna, la ausencia o insuficiencia de los ovocitos, o ciertos fracasos de implantación previos se pueden resolver satisfactoriamente mediante la ovodonación. La donación de ovocitos u ovodonación se ha extendido rápidamente por el mundo, siendo hoy un tratamiento eficaz, en pacientes cuidadosamente seleccionadas, con indicaciones precisas mediante la cual en la actualidad se obtienen tasas de embarazos del 40% al 45% por ciclo. Lo esencial en estos casos, es definir oportunamente cuándo una mujer debe intentar un nuevo ciclo utilizando los propios óvulos y cuándo debe ingresar al programa de ovodonación.

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Cantidad de embriones para transferir

Un factor importante de pronóstico favorable para una mujer es desarrollar en un mismo ciclo un mayor número de óvulos y de embriones. Clásicamente, se sostiene el concepto de la transferencia de cuatro o cinco embriones para incrementar la probabilidad de embarazo (a 35% por ciclo) y disminuir el riesgo de embarazo múltiple (no colocar más de cinco embriones). El embarazo múltiple fue la gran complicación de estos tratamientos, pero su incidencia ha disminuido drásticamente, por la relevante tendencia que preocupa en el presente sobre la necesidad de disminuir la cantidad de embriones que se colocan en el útero, justamente para evitar esta complicación.

Transferencia de blastocistos

Hoy se suma una nueva estrategia para disminuir aún más el riesgo de embarazo múltiple y aumentar más las probabilidades de implantación de cada embrión individual que se colocará en el útero. Este procedimiento se denomina transferencia de blastocistos. Esta técnica consiste en favorecer (usando medios de cultivo y sustancias especiales), y supervisar el desarrollo invitro de los embriones hasta aproximadamente el sexto día en el laboratorio. Es decir, se favorece y controla el crecimiento de los mismos hasta etapas más avanzadas.
Usando este nuevo procedimiento, se tiene la posibilidad de transferir en el útero embriones más desarrollados y más saludables, con el doble de capacidad de implante (lo que usualmente se conoce (como más viables).

Este procedimiento permite observar cómo, muchos embriones que se producen en la naturaleza, se detienen en su desarrollo (entre el 3er. y 6to. día) lo que reproduce los fenómenos que se aparecen en la mujer en cada ciclo natural. Es decir que los embriones son capaces de formarse naturalmente, pero pocos de ellos son capaces de llegar naturalmente a término.

La transferencia de blastocistos, tiene una expectativa de logro de embarazo de 50%, y adicionalmente mediante ella se anula el riesgo de embarazo múltiple si se transfiere uno o dos blastocistos de alta calidad. La posibilidad de criopreservar (congelar) embriones excedentes incrementará aún más las posibilidades de implantación disminuyendo la probabilidad de embarazo múltiple.

La capacidad del endometrio

La capacidad del endometrio para recibir al embrión es otro de los pilares que explica la probabilidad de un embarazo. Las diferentes sustancias que se producen localmente como respuesta a los medicamentos utilizados en el estímulo de la ovulación, los factores del sistema inmunológico, las infecciones, los miomas, pólipos, el hidrosálpinx (colección de líquido en la trompa de falopio) son algunos de los factores que pueden incidir en forma negativa o desfavorable para que endometrio se encuentre en condiciones favorables. Por ejemplo en el caso del hidrosálpinx, habrá que definir si existe un beneficio para la paciente si se lleva a cabo la extirpación o ligadura del mismo.

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La criopreservación

El estadío del desarrollo embrionario en relación al día de la transferencia (lo que se llama sincronía) es relevante como también la historia obstétrica previa (si hubo implantaciones previas exitosas). A veces será necesario definir si un paciente se beneficiará anulando la transferencia en el ciclo de tratamiento, por presentar un endometrio desfavorable, congelando esos embriones para transferirlos en los ciclos siguientes mediante el llamado ciclo artificial.

La capacidad del útero

La ausencia de un traumatismo uterino durante la transferencia, lo que significa evitar el sangrado o contracciones a nivel del útero, es un elemento trascendente como favorecedor del desarrollo embrionario. En general el trauma suele ser mínimo, pero suficiente como para afectar negativamente el embarazo. Esto puede producirse en pacientes con mínimas e imperceptibles alteraciones anatómicas a nivel del útero.

El estado inmunológico materno

Una nueva luz en el camino parecería ser la actual posibilidad de modificar el estado inmunológico. Hoy se sabe que la madre debe fabricar los llamados anticuerpos protectores o bloqueantes para que el embrión se implante favorablemente. Se ha observado que en mujeres con fallas reiteradas de implantación estos anticuerpos están ausentes. Pero se puede estimular su desarrollo aplicándole a esa misma mujer vacunas elaboradas especialmente que contienen en parte glóbulos blancos de su pareja. Esto logra, en el 60% al 80% de los casos, generar una respuesta materna protectora del embarazo y llegar a término.

Al entender las causas de las fallas de implantación se pueden aplicar distintas soluciones. En general de esto se trata, cada pareja es una situación especial y de esa misma manera debe aplicarse una solución a cada caso.

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