Mitos y creencias de la concepción

Existen muchos mitos o creencias cuando se intenta buscar un bebé. Aquí les presentamos las mentiras y verdades más comunes en torno a este tema.

Mitos y creencias de la concepción

Mitos y creencias para lograr un embarazo

Existen varios mitos en torno a la concepción, claro que también hay consejos que tienen basamento científico y conocerlos puede ser de gran ayuda a la hora de buscar un bebé. Aquí presentamos las mentiras y verdades más comunes en torno a la concepción.

No logro quedar embarazada porque estoy estrenada

Falso. Si bien es cierto que el sistema hormonal y el inmunológico están influenciados por aspectos psicológicos, el factor emocional no es capaz por sí mismo de impedir la concepción.

Claro que existen  trabajos científicos que prueban que al estresarse el cuerpo libera sustancias que modifican la producción de anticuerpos y la secreción de diferentes hormonas (tiroides, hipófisis, gónadas), sin embargo el estrés no es causa suficiente para imposibilitar el embarazo.

Si tengo relaciones durante la mañana mis chances de concebir aumentan

Falso. Esta afirmación es más un consejo de abuela que de médico, ya que no hay evidencias científicas al respecto.

Mantener las piernas hacia arriba después de tener relaciones me ayudará a quedar embarazada

Parcialmente verdadero. No es necesario quedarse con las piernas hacia arriba, pero sí se recomienda que la mujer permanezca unos veinte minutos en reposo con un almohadón debajo de las caderas. Después de ese tiempo, podrá levantarse e higienizarse, pero sin hacerse una ducha vaginal (chorro de agua proveniente del bidet).

Si un hombre pasa mucho tiempo sentado su fertilidad se verá afectada

Verdadero. La producción espermática puede verse afectada por la exposición al calor; por algo los testículos se encuentran fuera del cuerpo, ya que el esperma no podría sobrevivir a la temperatura interna del organismo.

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Los hombres que están tratando de concebir deben evitar frecuentar saunas y jacuzzis así como usar ropa ajustada. Los trabajos que exigen permanecer mucho tiempo sentado o exponerse a calores extremos (mineros, panaderos, etc…) también pueden resultar perjudiciales, ya que generan un aumento en la temperatura de los testículos.

La postura del misionero es la más adecuada para quedar embarazada

Falso. Se trata de una creencia que no tiene basamento científico. La postura del misionero (la mujer acostada boca arriba y el hombre encima) permite lograr una penetración más profunda que otras posiciones, pero eso no significa que ayude a concebir.

Si tengo relaciones todos los días mis posibilidades de concebir aumentarán

Falso. Justamente sucede todo lo contrario, ya que el hombre requiere unas 48 horas de abstinencia entre eyaculaciones para recuperar la cantidad de espermatozoides y su movilidad.

Para incrementar las chances de concebir, se recomienda mantener relaciones sexuales día por medio, una vez al día durante los días en los que se está ovulando. Estos varían de acuerdo a la duración del ciclo menstrual de cada mujer. A modo general, si se menstrúa cada 28 días, los días más fértiles serán los comprendidos entre día 11 y 16 del ciclo.

Una dieta sana y equilibrada me ayudará a quedar embarazada

Verdadero. La alimentación saludable, equilibrada y completa es fundamental por dos razones. En primer lugar, ayuda a una buena función hormonal, favoreciendo la ovulación y la buena producción de espermatozoides. Además, hay alimentos que podrían favorecer la concepción: pescado de aguas frías, con alto contenido de ácidos grasos omega 3 y 6 (sardinas, atún, etc.), vegetales verdes, ricos en ácido fólico y hierro. Derivados de las crucíferas (brócoli, repollo colorado, ricos en antioxidantes), germen de trigo (vitamina E), frutos secos (vitamina E, ácidos grasos poliinsaturados), cítricos (vitamina C), huevos y lácteos (vitamina D).

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Si tengo relaciones un día antes de la ovulación concebiré un varón, mientras que si quedo embarazada durante la ovulación tendré una nena

Falso. Si bien han aparecido múltiples informes al respecto, las evidencias científicas no son contundentes.

Esta idea puede tener su origen en el método Shettles, de los doctores Landrum Shettles y David Rorvik, autores del libro “Cómo elegir el sexo de tu bebé”. Se basa en que los espermatozoides que tienen el cromosoma Y (varón) se mueven más rápido y viven menos que los espermatozoides portadores del cromosoma X (mujer); por eso si busca un niño la pareja deberá tener relaciones lo más cerca posible a la fecha de ovulación, ya que el espermatozoide Y vencerá al X por su rapidez. En cambio si los futuros padres desean tener una niña, deberán mantener relaciones sexuales unos tres o cuatro días antes de ovular.

Asesoró:
Dra. Andrea Marazzi – Directora Médica de FERTILAB

Ginecóloga especialista en Medicina Reproductiva – MN 82496

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