El 2016 fue un año muy duro para Kayla Gaytan ya que en enero se le diagnosticó cáncer. En mayo la enfermedad había remitido y en junio se enteró de que estaba embarazada de cuatrillizos.
El cáncer durante el embarazo no es una enfermedad fácil de tratar en estas circunstancias. En su caso, la enfermedad pudo ser controlada durante más de la mitad de la gestación. Sin embargo, al cumplir las 28 semanas los médicos confirmaron que le cáncer se había manifestado nuevamente.
Dos semanas después, a las 30 semanas de embarazo, los cuatro bebés nacieron por cesárea para que Kayla pudiera comenzarlo más rápido posible el tratamiento para su linfoma de Hodgkin.
Su esposo Charles creó una página en GoFundMe, en donde explicó la dura historia que pasó durante los últimos 12 meses junto a su mujer y sus dos hijos mayores. Sin embargo, y a pesar de muchas altos y bajos, su pareja dice que aún se sienten “muy bendecidos”.
“Hemos sido muy afortunados en nuestras vidas, sin embargo, apreciamos cualquier ayuda ya que tenemos un largo viaje por delante”, escribió.
En un reportaje realizado por Today, Kayla comentó que fue diagnosticada con la enfermedad de Hodgkin, un cáncer en el sistema linfático, justo antes de cumplir 29 años y una semana después de casarse con Charles.
Todo comenzó con una molesta picazón muy persistente y un mal diagnóstico médico de más de un año y medio.
Luego de soportar cinco meses de quimioterapia y transfusiones, le informaron que las posibilidades de volver a quedar embarazada eran muy escasas.
Sin embargo, un mes después de que el cáncer de Kayla remitiera, la pareja que ya tenía dos hijos, se sorprendió al descubrir que estaba embarazada. Y no sólo esperaban a un sólo bebé, sino cuatro.
“Había cuatro latidos de corazones sanos. Fue realmente un milagro”, dijo Kayla a TODAY.
Kayla y sus médicos habían decidieron una cesárea programada para luego de las 34 semanas de embarazo. Pero lamentablemente, los primeros síntomas de la reaparición de su enfermedad comenzaron a manifestarse mucho antes.
Después de que le realizaran una biopsia, la pareja confirmó sus peores temores e inmediatamente adelantaron la fecha de parto. Charles comentó que su mujer necesita un trasplante de células madre seguido de 16 meses de quimioterapia.
“Con una pena muy grande en el corazón y junto con nuestro equipo médico decidimos adelantar la cesárea de los bebés a las 30 semanas ya que Kayla necesita comenzar el tratamiento de inmediato”.
Los cuatrillizos prematuros a los que llamaron Charles, Michael, Victoria y Lillian nacieron el 30 de diciembre y permanecen en la unidad de cuidados intensivos neonatales del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt en Nashville, Tennessee.
Mientras tanto Kayla ha comenzado el tratamiento de quimioterapia con un 50% de posibilidades de que su cáncer remita dentro de los próximos cinco años.
“Es un poco abrumador, no voy a mentir. Honestamente, sólo vio el día a día”, dijo Kayla a TODAY.
“Con suerte, podré superar esas probabilidades. Sería más fácil para mí ir a sentarme en una esquina y llorar todo el tiempo y estar molesta por todo lo que está sucediendo. Pero pienso en la increíble familia que poseo y el apoyo que tengo a mi alrededor que realmente me ayuda a superar todos los días”.
Desde aquí nuestros mejores deseo para esta fuerte mamá, que con los peores pronósticos ha dado a luz a cuatro bebés y que continúa su lucha con la esperanza de criar a esta familia tan numerosa.